Una decisión y una niña

20 de Junio de 2006 Martes

Ayer, Fernando me contó que la opción que eligió, de entre su madre o su chica, fue estar con su madre. Lo felicité, ya que es la opción más obvia. Fernando me contó que el viernes llegó a su casa y le dijo a su mamá que iba a salir por un rato. Su mamá no sospechaba nada, incluso pensó que su hijo no se iba a acordar de su cumpleaños. Luego en la noche, coordinó con el resto de su familia un plan. ¿Cuál fue?... 

 

El sábado en la mañana, Fernando no asistió a la competencia, pues él y su familia arreglaron, muy discretamente, el cuarto de su mamá mientras ella dormía. Cuando su mamá despertó, se sorprendió mucho, ya que Fernando tomó una foto cuando se levantó y ella vio a su papá (el esposo de la señora) con una torta de cumpleaños y su papá y mamá a los costados de su esposo. El cuarto estaba totalmente adornado con flores que Fernando había comprado el día anterior sin que su mamá se haya dado cuenta. La mamá de Fernando estaba tan conmovida que empezó a llorar de felicidad. Abrazó y agradeció a toda su familia, mientras que Fernando me dijo que sentía muy bien consigo mismo y le gustó ver a su madre muy feliz. Aunque aún se sentía un poco culpable por no haber cumplido su promesa con Andrea.

También me contó que ese mismo día en la tarde, después de la celebración, él con su papá estaban lavando los platos. En ese momento, Fernando le preguntó a su papá si podía salir, ya que sus papás iban a salir más tarde. Al comienzo su papá estaba dudando, pero Fernando le explicó que era el cumpleaños de novia y le había prometido hace días, etc, etc. Su papá le hizo muchas bromas bromas, pero al final le dio permiso. Le dio dinero para que le pudiera comprar algo bonito a Andrea. Fernando lo recibió con gusto y se fue dejando a su papá lavando los platos solo.

Fernando no quiso entrar en detalle en esta parte que voy a contar. Pero, para hacerme reír, me contó algo parecido a esto: Cuando Fernando se encontró con Andrea. Lo primero que hizo ella fue besarlo. Él siguió y siguió hasta que un policía en la entrada les dijo que pasaran, porque ahuyentaban a la gente.

Bueno, pasando de lado a Fernando, ayer me di cuenta que Crístofer está escribiendo poemas que tenían que ver con un perfume, uniforme pequeño, una niña etc. No tenía ni idea a qué se refería, ya que Rosalina no lleva el uniforme corto ni tampoco era pequeña. Ayer, cuando subí a la movilidad, Gina y yo nos dimos cuenta de que una niña dos años menor que nosotros se sentaba al lado de Crístofer y que, en el camino, ella iba teniendo sueño. Poco a poco se iba acercando al hombro de Cristofer hasta quedarse dormida ahí. Eso explicaba por qué últimamente no conversaba con nosotros en la movilidad. Como es obvio, nos reímos de él, porque ya me había dado cuenta de dónde sacaba su inspiración para escribir. Creo que Crístofer se ha encariñado un poco con esa niña. Eso creí hasta el día de ayer. El día de hoy pasó algo muy gracioso.

En fin, hoy, él nos pidió que lo acompañáramos a comprar en una tienda cerca a su casa y, ya en su casa, que lo ayudáramos a ordenar. Pero de camino, pues parece que vive cerca, estaba esa niña. Ella lo llamó y no entendíamos de qué se trataba. Vimos gestos raros y graciosos, a Crístofer avergonzado y luego ella se fue corriendo. Crístofer vino hacia nosotros con una cara sorprendida e intriga. Le preguntamos qué pasó y nos respondió: "Se me declaró" - Gina y yo le preguntamos con un qué y nos repitió lo mismo. No sabíamos qué decirle, quedamos con la boca abierta y le preguntamos qué dijo. Él repondió: "Le dije que ya tenía novia y luego se fue corriendo..." - No tengo palabras, solo creo que tiene su atractivo hasta con las niñas pequeñas; aunque me parece que eso es ilegal JAJAJA.