20 ago 2010

Una pelea contigo... Parte 1

24 de Octubre de 2006 Martes 
 
No tengo muchas ganas de hablar, siento mucha furia hacia Gina. Que estúpida... ¿Por qué me golpeó? La verdad, no sé si me lo merezco... Me desahogaré un poco... El día empezó tranquilo, subí a la movilidad, la encontré sentada ahí como siempre. Me senté a su lado como todos los días y empezamos a conversar con Crístofer y Sofía. 
 
Las horas de clase, totalmente divertidas, porque los profesores se comportaban de manera inusual. Al llegar el recreo, todos empezamos a conversar (Katty, Teresa, Ronald, Pepe, Mike, etc.) Por alguna razón, todos empezamos a conversar de Rita, pero en unos minutos la conversación parece como si se hubiera puesto un poco... ¿Incómoda? (no tengo palabras para describirlo). Hasta que en cierta parte de la conversación Gina me empezó a molestar con Rita y Ema. 
 
Por un rato estuvimos conversando normal y también me reí un poco; pero, después de un rato, todos hablaban como si les hubiera hecho algo a esas dos. Gina seguía y me molesté un poco, pues no quería que sospechara de lo que pasó hace tiempo. Le pedí que se callara, pero no se detenía. Le pedí otra vez que se callara, pero esta vez con un tono de voz más fuerte... Así estuvimos un rato, pues ella también subía su tono de voz. Hasta que de verdad me molesté y le grité muy fuerte, incluso le agarré las manos por lo gestos que hacía. 
 
La empecé a molestar con algunas cosas personales, pues había insinuado que le había sido infiel con Rita. Nos empezamos a gritar y nuestros amigos trataron de calmarnos. Les grité diciendo que no se metieran y seguimos discutiendo, sin importar cómo nos vieran. Nos empezamos a meter con los padres del otro, hasta que, en tanto griterío que estábamos, Gina me tiró una cachetada. Hubo mucho silencio... Me quedé callado. Ella aún estaba con una mirada desafiante, la miré de una manera furiosa y me fui a la azotea a mirar el cielo, ya que siempre me tranquiliza en momentos difíciles. En el segundo receso, también me fui a la azotea y solo aparecieron Mike, Crístofer y Ronald para acompañarme, hablaron entre ellos de cualquier cosa. 
 
Ahora, simplemente no la quiero ver... No estoy con el suficiente humor para tolerarla. No les escrito, ni la he llamado o viceversa.

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