30 de Octubre de 2005 Domingo
Hoy no estaba planeado ir a la playa... En fin, lo que ocurrió ahí fue algo bonito. Eso es por un lado; pero, por otro, no sabría cómo describirlo, ya que tiene que ver con Estéfani.
Gina me tiene mucha confianza y ahora ya puedo hablar tranquilo con Estéfani, por eso hoy estuve conversando a solas por un buen rato con Estéfani mientras caminábamos solo lejos de Mike, Teresa y Gina que estaban conversando. Gina a veces volteaba para verme, lo que me gustaba porque sentía le importaba. Luego de estar conversando un rato sobre las clases, nuestros padres, nuestros amigos, etc. Estéfani me preguntó con una voz un poco nerviosa:
- ¿Te parezco bonita?... Dime la verdad... ¿O solo estás cerca de mí para matar el tiempo?
Me puse muy nervioso, no entendía el porqué. Me sentía como cuando me le iba a declarar a Gina. Pasé saliva, me sonrojé y, cuando iba a responderle, se me enredó la lengua, tartamudeé. Estéfani se empezó a reír, nos reímos un rato, le dije que mejor luego le respondía y me hizo cosquillas para que le respondiera. Ya más calmados, le respondí algo como:
- La verdad... es que tú... sí me... pareces... muy linda.
Me sentía muy avergonzado por decir eso. Ella empezó a reír mucho con una sonrisa de oreja a oreja, se lanzó a mí y me abrazó muy fuerte mientras me decía:
- Humildemente, sé que lo soy; pero, me gusta que lo hayas afirmado. JAJA
Nos reímos de su respuesta. Luego Teresa llegó corriendo para saber qué le hice a Estéfani. le explique lo que había pasado y Teresa se calmó un rato y me dijo en voz baja:
- No te estarás pasando con Tefy. ¿verdad?
Me asusté un poco y le respondí que también la consideraba mi hermana. Aunque sí me llamaba la atención y, ahora que reflexiono un poco, quiero seguir hablando con ella... Después, todos fuimos a comer en un restaurante. Comimos muy bien y Teresa, como ahora tenía mucho dinero, ella quiso pagar todo, que generoso de su parte. Aún así Gina, Mike y yo sentíamos la obligación de poner dar algo por la comida. Teresa se rio y apreció nuestra voluntad, igual pagó sola. Al final, todos regresamos a nuestras casas en transporte público, un bus. Estábamos a unas manzanas de nuestras casas y empezamos a caminar desde donde nos había dejado. Mike, Teresa y Estéfani se fueron por un camino, mientras que Gina y yo también fuimos por otro. Cuando estábamos camino a su casa me preguntó muy curiosa con una voz de "quiero saberlo todo":
- ¿De qué tanto hablaban tú y Estéfani?
Le conté todo de manera muy resumida y me respondió, como si no le hubiese contado más. Por lo menos sé qué le importó de la conversación:
- ¿Te parece linda... más que yo?
Le contesté rápidamente sin dudar un segundo:
- Estéfani sí me parece linda, pero no más que tú. Te quiero mucho, si peleamos es por las tonterías que suelen pasarme o que hago. JAJA
Nos reímos, porque era en parte verdad, me abrazó y me besó en la mejilla muy tiernamente. Aunque, no le conté que, cuando le respondí a Estéfani, me sentí muy nervioso, me pregunto si se preocupará. Bueno, lo que no sepa no me preocupa mucho. En fin, mientras caminábamos, me agarró de la mano y me dijo que la acompañara al supermercado, pues necesitaba algunas cosas para la casa. Lo último es que, como la vi en traje de baño, me dieron ganas de ponerme mañoso; así que, mientras ella buscaba los cosas que necesitaba, le agarraba la barriga, un poco la oreja, la abrazaba por el estomago, la cintura, etc. Ella se reía, pero no le incomodaba.
Hoy no estaba planeado ir a la playa... En fin, lo que ocurrió ahí fue algo bonito. Eso es por un lado; pero, por otro, no sabría cómo describirlo, ya que tiene que ver con Estéfani.
Gina me tiene mucha confianza y ahora ya puedo hablar tranquilo con Estéfani, por eso hoy estuve conversando a solas por un buen rato con Estéfani mientras caminábamos solo lejos de Mike, Teresa y Gina que estaban conversando. Gina a veces volteaba para verme, lo que me gustaba porque sentía le importaba. Luego de estar conversando un rato sobre las clases, nuestros padres, nuestros amigos, etc. Estéfani me preguntó con una voz un poco nerviosa:
- ¿Te parezco bonita?... Dime la verdad... ¿O solo estás cerca de mí para matar el tiempo?
Me puse muy nervioso, no entendía el porqué. Me sentía como cuando me le iba a declarar a Gina. Pasé saliva, me sonrojé y, cuando iba a responderle, se me enredó la lengua, tartamudeé. Estéfani se empezó a reír, nos reímos un rato, le dije que mejor luego le respondía y me hizo cosquillas para que le respondiera. Ya más calmados, le respondí algo como:
- La verdad... es que tú... sí me... pareces... muy linda.
Me sentía muy avergonzado por decir eso. Ella empezó a reír mucho con una sonrisa de oreja a oreja, se lanzó a mí y me abrazó muy fuerte mientras me decía:
- Humildemente, sé que lo soy; pero, me gusta que lo hayas afirmado. JAJA
Nos reímos de su respuesta. Luego Teresa llegó corriendo para saber qué le hice a Estéfani. le explique lo que había pasado y Teresa se calmó un rato y me dijo en voz baja:
- No te estarás pasando con Tefy. ¿verdad?
Me asusté un poco y le respondí que también la consideraba mi hermana. Aunque sí me llamaba la atención y, ahora que reflexiono un poco, quiero seguir hablando con ella... Después, todos fuimos a comer en un restaurante. Comimos muy bien y Teresa, como ahora tenía mucho dinero, ella quiso pagar todo, que generoso de su parte. Aún así Gina, Mike y yo sentíamos la obligación de poner dar algo por la comida. Teresa se rio y apreció nuestra voluntad, igual pagó sola. Al final, todos regresamos a nuestras casas en transporte público, un bus. Estábamos a unas manzanas de nuestras casas y empezamos a caminar desde donde nos había dejado. Mike, Teresa y Estéfani se fueron por un camino, mientras que Gina y yo también fuimos por otro. Cuando estábamos camino a su casa me preguntó muy curiosa con una voz de "quiero saberlo todo":
- ¿De qué tanto hablaban tú y Estéfani?
Le conté todo de manera muy resumida y me respondió, como si no le hubiese contado más. Por lo menos sé qué le importó de la conversación:
- ¿Te parece linda... más que yo?
Le contesté rápidamente sin dudar un segundo:
- Estéfani sí me parece linda, pero no más que tú. Te quiero mucho, si peleamos es por las tonterías que suelen pasarme o que hago. JAJA
Nos reímos, porque era en parte verdad, me abrazó y me besó en la mejilla muy tiernamente. Aunque, no le conté que, cuando le respondí a Estéfani, me sentí muy nervioso, me pregunto si se preocupará. Bueno, lo que no sepa no me preocupa mucho. En fin, mientras caminábamos, me agarró de la mano y me dijo que la acompañara al supermercado, pues necesitaba algunas cosas para la casa. Lo último es que, como la vi en traje de baño, me dieron ganas de ponerme mañoso; así que, mientras ella buscaba los cosas que necesitaba, le agarraba la barriga, un poco la oreja, la abrazaba por el estomago, la cintura, etc. Ella se reía, pero no le incomodaba.
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