1 sept 2011

Tranquilidad, banda y amigos...

19 de Febrero de 2007 Lunes

Ha empezado otra semana de clases. La verdad, ahora me siento más tranquilo, siento que ya no me preocupa nada, supongo que es debido a que sé que Estef está conmigo. El problema son las clases, ya que el colegio empieza el 5 de marzo y la inauguración será el 2 de marzo. Lo único que puedo hacer ahora es aprovechar el tiempo que tengo, porque mis clases de inglés y matemáticas terminan este viernes. Y~~~... Ya no quiero hablar de nada, lo único que quiero decir es que Estef está conmigo. Yujuuuuu~~~

Rayos, debo calmar mi emociones un poco. Bueno, ahora debo decir que ayer hemos practicado como banda con algunos instrumentos prestados de mis hermanos y uno improvisado en mi casa. Akira, Cristofer, Fernando y Nicolás, vinieron a mi casa para ver qué tal nos iba para poder iniciar bien la banda. Akira no había traído su bajo y le presté el de mi hermano, debido a que él no está aquí y no se puede enojar JEJE. A Fernando le di los bongós, de mis hermanos también, y en vez de baquetas le presté unos lápices; además, improvisó el resto con diferentes herramientas del almacén. Nicolás tiene guitarra y a Crístofer le conecté un micrófono en el equipo de sonido de mi hermano... Para ser nuestra primera vez que tocamos juntos, no estuvo tan mal. Crístofer desafinó un poco, pero está bien. Nicolás solo tiene que practicar un poco más; y no solo él, sino que también a todos como banda. No es que me lo vaya a tomar muy muy seriamente, pero me gustaría tocar en colegio.

Pasando a otro tema, Ramiro, Katty, María y Robin están practicando danza. La verdad, no me gusta mucho la danza (practicarla), pero me entretiene ver cómo se mueven... Por último, quiero decir que cuando empiecen las clases, Rosalina, enamorada de Crístofer, irá a nuestro colegio. La verdad, en mi opinión, para su relación está bien, pero para las notas de ambos puede ser perjudicial, ya que cuando están juntos se comportan como... Como... La manera más amable que puedo decir es: "Como unos tarados" - No quiero explicar el porqué, solo digo que casualemente unos días los vi estudiar juntos.

21 jun 2011

Nuestro 14 de febrero

14 de Febrero de 2007 Miércoles

¡¡¡Sí!!!. Estoy más feliz que... Que. No se me ocurre nada, pero estoy tan feliz que no puedo contener mis ganas de gritar. Podría decir, ahora sí, que Estef y yo estamos juntos. Estoy tan contento, hasta creo que no podré dormir en la noche por tanta emoción que siento en todo mi cuerpo... Me siento tan feliz, hasta creo que ya no me importa Jina... Que bien se siente escribir eso.

Esta mañana estaba muy nervioso, ya que quería llamar a Estef para salir. Al principio no podía ni acercarme a mi celular, no lo quería mirar. Pero ya cuando estaba decidido, lo miré y estaba tan avergonzado que empezé a correr unas vueltas por toda la casa para poder despejar mi mente y estar más tranquilo. Momentos antes del momento de la verdad, me senté, busqué su número, lo marqué, tomé un gran respiro y cuando ella dijo:"¿Aló?". Entraron mis hermanos a mi cuarto y por el susto solté mi celular y se le salió la batería. Me molesté y les dije que se fueran hasta que termine de hablar por teléfono... Me molestaron un rato y me tuve que ir a otro lugar a poder llamar. Ya en un lugar más tranquilo, la volví a llamar y cuando contestó dije, a pesar de que no pasaron ni 2 segundos: "¿Quieres salir conmigo esta tarde?". De una manera muy alterada y estúpida. Ella se escuchaba nerviosa, ya que este día es para pasarla con la persona que más quieres, por lo menos así lo venden en la publicidad.. En fin, me dijo: "Sí claro... ¿A dónde vamos? Aún estás en deuda conmigo". Empecé a reirme y charlamos un buen rato sobre la cita.

Se supone que hoy tenía clases, por lo que el problema era persuadir a mis papás para que me dajaran ir con Estef, ya que estoy de vacaciones... Quería no pensaran que por ser 14 de febrero me importara este día y les dije que quería salir con mis amigos. Ellos se miraron, me miraron con una ligera sonrisa y me dijeron: "¿No nos digas que ya estás saliendo con otra chica?". Me sonrojé y les dije que solo quería salir con mis amigos, pues para mí siempre estos días son iguales que cualquiera. Lo bueno es que al final tenía el persmiso de mis papás y ya no tenía ningún problema.

Llegada la tarde, no podía creer lo ansioso y nervioso que estaba. Antes de salir de mi casa, trataba de calmarme, porque si no lo hacía lo más probable es que hubiese dicho más estupideces que las usuales... Mientras caminaba por la calle, estuve muy atento, miraba el suelo y a todas partes por si ocurriese alga estupez. Gracias a Dios no me ocurrió nada, solo un pequeño encuentro con Cristofer y Rosalina. Me dijeron... La verdad no me acuerdo mucho de lo que me dijeron. Para no salirme, llegé a casa Estef, Teresa me abrió la puerta y me dijo que la esperara en la sala, ya que Estef tenía clases de teatro. Le comenté que ella no me había dicho nada sobre sus clases de treatro. Teresa me dijo con una voz de sorpresa: "¿De verdad... Creí que ya te lo había contado? Normalmente le gusta hablar de eso con nosotros".

Momentos después, ella llegó y la vi con su traje de actuación, ya que estaban ensayando las partes finales para la presentación, la cual iba a ser el 25 de febrero. Ella se avergonzó, porque los ensayos la habían retrasado; además, ella no me había dicho nada, pues quería que fuera una sorpresa. Me sonrojé un poco y le dije que la iba a esperar, que se tomara su tiempo, ya que teníamos mucho tiempo. Me miró con ojos de gato, me quedé atontado y se fue a cambiar. Teresa solo nos miró con una cara extraña y dijo: "Bueno Luchín, para que te estés divirtiendo, me imagino que ya avanzaste la tarea vacacional que dejó el colegio". En esos momento la tarea era lo que menos me importaba.

Después que Estef termino de cambiarse, nos fuimos caminando y en todo el camino no la dejé de mirar, porque estaba muy bonita. Estaban tan atento en ella que me choqué en un poste. Ella se preocupó y con sus manos me frotó la frente donde se había inflamado un poco. Por mi mente solo sentía vergüenza y alegría por lo que pasaba. En el cine, mientras esperábamos que empezara la película, le pregunté de qué se trataba la obra. Ella tan solo me dijo algo como: "Es una sorpresa, así que no preguntes". Me dijo que estaba algo cansada y recostó su cabeza en mi hombro. En ese momento, mi corazón comenzó a latir tan rápido que pensé en la probabilidad de un paro cardiaco HAHAHA. Miramos la película, aunque yo al mismo tiempo no podía mirar, debido a que siempre me distraía mirandola. Al terminar la película, me dijo sonrojada: "Me estuviste mirando casi toda la película...¿Verdad?". Muy sonrojado e intentando inventar algo, pero no me salió y le dije que sí. Ella muy sonrojada me estaba sonriendo, se le notaba feliz.

Fuimos a tomar una bebida; pero como siempre, no faltaba algo en el camino que arruine el momento; mientras estábamos caminando, me cayó un pelotazo en la cabeza. Eso me molestó mucho; Estef me miró y me dijo que me calmara... Al llegar al lugar, conversámos demasiado y, unos minutos después, ella me tomó de la mano y me dijo algo sonrojada: "¿Vamos a dar unas vueltas por el parque?... Hoy la luna está llena y es hermosa". Solo pasé mi saliva y muy nervioso le dije que sí... Llegando al parque, nos sentamos y le dije: "Bueno... ¿Ya estás lista para continuar lo que dejamos el jueves pasado?". Se sonrojó, y cuando acercamos nuestras caras, se puso nerviosa y me dijo: "Espera... ¿Así... Tan deprisa?... No es que no quiera, pero primero espera a que me calme...". La miré, luego me dijo que no la mirara y empezamos a actuar como niños, pues yo la seguía mirando mientras ella se tapaba la cara con las manos.

Le saqué las manos de la cara lentamente y vi lo rojita que estaba. Mientras agarraba sus manos, le dije que para que la presion bajara: primero yo la iba a besar en la mejilla y luego ella a mí. En parte así fue, pues sí la besé; pero, cuando ella me iba a besar, no lo hizo y alejó sus labios. Le pregunté el porqué y me respondió que estaba muy feliz y nerviosa. Dijo que lo intentaría otra vez, pero, en ese momento, giré la cabeza, porque parecía que se alejaba y casualmente nuestros labios se encontraron. Desde ese momento, sentí que ya no teníamos ese miedo y vergüenza de hablar el uno con el otro en ese parque... Estuvimos por casi una hora charlando y haciendo lo que teníamos que hacer HAHAHA. Hasta que nos dimos cuenta que ya era tarde y pensamos en dejalo para el fin de samana. Me sonrió y fuimos a su casa... En la puerta de su casa, sacó sus llaves, acerqué mi cara para besarla en la mejilla, pero ella se lazó hacia mí y me besó por un buen rato. Me quedé algo atontado, pero feliz.

Cuando llegué a mi casa, me dirigí a mi cuarto. Sin embargo, mi mamá, que pasaba por ahí, me miró, como si de un escaner se tratara, y me dijo: "A ver... ¿Por dónde empiezo?... Primero, tus labios están con brillo... ¿Sabor a fresa?; segundo, hueles bastamte a perfume; tercero, tu cabello aún está un poco desarreglado; y por último, estás muy sonrojado y con una sonrisota". Lo único que hice fue afirmar con la cabeza e irme a mi cuarto. Al llegar, solo estuve pensando en ella... Mejor dicho, hasta ahora estoy pensando en ella...

6 jun 2011

Algo nuevo ocurrirá

08 de Febrero de 2007 Jueves

Los días pasan volando, aún no puedo creer ya casi se termina otra vez semana... Mis vacaciones se terminan y yo encerrado como gato en jaula. Hay momentos en los que llego a colapsar, pero debo soportarlo, ya que ,despues de todo, puedo estar con Estef cada vez que yo quiera. Solo hay algunas ocaciones en las cuales ella no se encuentra, porque sale con sus amigos.

Bueno, si dejo de lado todo esto negativo, me siento feliz, porque es probable que formemos una banda de rock: Fernando, baterista; Crístofer, cantante; Akira, bajista; Nicolás, guitarra... Seguro se preguntan como es que mis amigos tienen habilidades con esos instrumentos. La respuesta es sencilla: Fernando practicó bateria cuando tenía 11 años; Crístofer es un cantante increíble. Sabe cómo modular su voz de acuerdo a situación necesaria y cuando está inspirado, se lanza, enloquece un poco, etc; Akira es buena tocando el bajo, porque pertenecía a una antigua banda del colegio, pero esta ya se separó, debido a que 2 de los integrantes principales terminaron el colegio y ya no están en la ciudad; Nicolás no recuerda mucho, pero tocó cuando era niño y me ha pedido que lo ayude a practicar... Aún no hemos tocado todos juntos, pero estoy seguro que vamos a tocar genial.

Debido a que la conversación de una banda fue hoy, fui a casa de Estef. Quería que se enterara por mí y no por Akira... Al llegar a su casa, me abrió su mamá, quien me saludó amablemente, y me dijo que Estéfani estaba en su cuarto. Me fui a su habitación, porque su mamá me dejó. A medio camino, me encontré con Teresa, que estaba con una ropa super pequeña, y me sonrojé mucho; ella se sorprendió de verme y tambien se avergonzó un poco, me preguntó si no tenía tareas qué hacer. Me empecé a reir y le dije que ya las había hecho. Ella me miró y dijo: "Está bien, te creo". Me quedé un poco atontado, porque se le notaban mucho las... Teteras. Se sonrojó, se cubrió, me llamó pervertido y me dijo que fuera con Estef. Toqué la puerta y la encontré echada jugando en la cama y, a su lado, la gatita (Misha). La gatita se veía mucho mejor, se notaba que la había bañado. A parte de eso, como me encantan los juegos, me olvidé de casi todo, me acerqué mucho a Estef y le pregunté qué estaba jugando. Sonrojada me dijo: "Aún no me saludas ¿y ya quieres jugar?...". Pasó su saliva y me besó en la mejilla. Luego terminó diciendome: "Por lo menos, salúdame".

Dejé de pensar en el juego, la miré y me sonrojé. Empezamos a conversar y me contó cómo había cuidado a Misha desde ese día. Luego, en medio de la conversanción le conté la probabilidad de hacer una banda de rock. Muy feliz me dijo: "Es una buena idea, ya que eres muy bueno tocando la guitarra... Tocaste una canción en la clausura del colegio, fue genial...". Cuando dijo eso, recordé lo ocurrido y sentí unos pequeños escalofríos, porque, quiéralo o no, aún me afectaba. Me miró y me preguntó si estaba bien, le dije algo melancólico: "En ese tiempo... Le iba a dedicar...". Ella se dio cuenta y me dijo algo como: "Ah, ya recuerdo, perdón... No era mi intención, yo solo decía...". Le dije que no se preocupara, me recosté en su cama y me quedé pensando. Luego recostó su cabeza junto a la mia y me empezó a conversar de otro tema...

Diez minutos antes de irme, recostó su cabeza en mi hombro y muy sonrojada me dijo: "Ahh~~ Podemos...Be... Rayos...¿Podemos besarnos?". Me sorprendí bastante, pues me lo pidió de la nada. Muy sonrojado, con el corazón latiendo a mil por hora, le dije que no había problemas. Nos sentamos, empezamos a acercar nuestras caras, cuando de repente Teresa, que pasaba por ahí para preguntarle algo sobre ropa, nos vio en una situación muy obvia para cualquier ser humano. Nos separamos muy rápido y le preguntó algo avergonzada si ya tenía todo listo para mañana en la mañana. Estéfani le dijo que sí; después, molesta le pidió que primero tocara la puerta. Pasados unos segundos en los cuales me reí y más calmados volvimos a intentarlo. Solo quiero agregar que ella estaba muy roja, ni qué decir de mí. Esta vez estuvimos más cerca, porque sentía su lenta respiración en mis labios, pero su mamá tocó la puerta para preguntarle unas cosas personales y tuvo que salir de la habitación. Me volví a reír, pues la reacción de Estef fue un pequeño saltito. Unos minutos después, volvió y me dijo: "En dónde nos quedamos?". Antes de que ella pudiera sentarse en la cama, sonó mi celular. Eran mis papás y, sin necesidad de hablar mucho, me dijeron que llegue en 7 minutos con 47 segundos, sino estaría problemas...

No pude hacer nada. Le dije a Estef que debía llegar a mi casa lo más pronto posible, porque no le había avisado a mis papás; además de ser ligeramente amenazado por ellos. Me levanté, la besé en la mejilla, pero antes de irme, me agarró de la mano y me dijo: "Un último intento". Mi corazón se volvió loco y fue un besito rápido, podría decirse: "Un piquito". Ella estaba mirándome con una cara de: "¿Eso es todo?". Solo le di otro y me fui... Mientras corría a casa, no podía pensar en nada más, estaba tan contento que daba pequeños saltos. Sin embargo, al llegar a mi casa, me sentía como un estúpido, ya que mis papás solo estaban bromeando, no creían que llegaría tan rápido...

10 may 2011

Libertad inquietante

03 de Febrero de 2007 Sábado

Ya pasó una semana. Gracias a Dios, mis papás han sido comprensivos y me han creído por lo ocurrido el viernes pasado. Hoy logré convencerlos y me dejaron salir con mis amigos. No obstante, hasta la otra semana estoy castigado y solo puedo salir hasta las 8. Pasada esa hora, tengo que haber llegado o las consecuencias van a ser graves... Bueno, por lo menos eso es lo que me dijeron.

Hoy estaba algo desesperado, porque estoy estudiando en mis vacaciones y debería estar con mis amigos. Por eso hoy hablé con mis papás para que me dejaran salir. Ellos lo pensaron por unos minutos y me dijeron algo como: "Está bien, pero con una condición... Ahora que conste que estas avisado". Yo simplente estaba muy feliz y llamé a Cristofer, Ronald, Mike, Pepe. Solo llegó Crístofer y, al no poder hacer nada en grupo, le dije que fuéramos al colegio. Al principio, Crístofer me miraba de una manera: "Maldición no quiero". Le insistí mucho para poder ir, hasta que aceptó; además, no había mucho qué hacer por los alrededores. El viaje fue más rápido que en época de colegio, ya que todos están de vacaciones.

Al llegar al colegio, nos dirigimos a la piscina, ya que no había nadie en los patios y ver las aulas me haría recordar los malos momento que viví en el verano del año pasado. De camino a la piscina, nos encotramos con Estéfani cerca a la pista atlética, porque estaba entrenando con su equipo. Ahí ella me saludó muy alegre y nos prenguntó qué hacíamos en el colegio. Sonriendo le respondí: "Estábamos aburridos y como todos estaban ocupados, decidimos dar un pequeño saludo a quienes estuvieran aquí". Ella estaba feliz, le dije que íbamos a la piscina y nos pidió que la esperaramos, ya que solo le faltaba una hora de entrenamiento. Algo atontado le respondí que sí y antes de ir a la piscina me dijo: "Oye, tenías razón... Esta talla está mucho mejor". Me quedé pensando un rato, la miré y recordé lo del short. Le respondí de forma divertida y pensé que solo lo había hecho para que no se le notara la retaguardia.

De camino a la piscina, Crístofer me preguntó: "Esto~~~... ¿Estás saliendo con Estéfani... Ya superaste lo de..."ella"? - Le dije que prácticamente me había olvidado de Jina y que no, aún no estaba saliendo con Estéfani. Él me quedó viendo con una cara rara. Esta vez no podía leer la expresión de su cara... Al llegar a la piscina, nos encontramos con María, quien estaba haciendo natación como todos los años. Al saludarla, Crístofer no tomó ni dos segundos y le dijo algo como: "¿Sabías que Luis está saliendo con Estéfani?" - Alarmado y muy sonrojado trataba de ocultar mi cara mirando a otras partes. María al escuchar esto me dijo: "¿AH.. La hermana menor de Teresa? Ya te olvidaste de Jina o la usas como una excu...? - Le dije que ya no me afectaba y que de verdad me gustaba Estéfani, pero que aún no estábamos saliendo. Solo una vez que casualmente nos encontramos y otra en la cual estaba sola en su casa. Ellos me miraron y dijeron: "No seas tonto, entonces sí están saliendo". No les respondí nada, ya que los nervios con los que estaba me habían dejado sin habla. Estuvimos conversando 45 minutos y fuimos a ver como entranaba Estéfani. Era muy rápida; creo que era más rápida que yo.

Al terminar su entrenamiento, fuimos por ella; se despidió de sus amigas y fuimos a dar un vueltas por el colegio, dado que habían otras actividades deportivas y otras como pintura o teatro. Cerca al taller de pintura, nos reímos un rato por las escultura con arcilla que estaban haciendo los niños. La profesora, quien estaba cerca, nos preguntó qué hacíamos ahí. Les repondimos que era un pequeño paseo después del deporte. Muy amable nos preguntó si queríamos hacer esculturas, pues había sobrado material. Pero, vi que Crítofer y Estéfani no querían Así me disculpé y nos fuimos a nuestras casas.  De camino a su casa, en el taxi, Crístofer se sentó adelante y todos empezamos a conversar con el taxista. Me encontraba un poco nervioso por tener a Estéfani a mi derecha, ya que se encontraba en shorts. A medio camino, ella puso su mano encima de la mía y nos empezó a agradecer a mí y a Crístofer por haberla acompañado, ya que su papá iba a llegar por lo menos una hora más tarde... Mi corazón estaba loco, pero eso era poco. Cuando faltaba 10 minutos para llegar, apareció un tráfico que no sé de donde salió. Como Estéfani estaba cansada, se caía de sueño y se recostó en mi hombro; estaba más nervioso que antes y sentía que el corazón se salía por la boca. En el camino el taxista me preguntó: "¿Acaso son pareja tú y la chica?". Le respondí que no, de una forma muy alterada y nerviosa. Pero Crístofer dijo que solo estaba bromeando y que sí éramos. El señor se rio y dijo: "Espero que no estén haciendo tonterías... En todo caso, protéjanse". Crítofer se rio bastante y dijo: "Es lo que siempre le digo". En mi caso, me avergoncé bastante y la miré para saber si aún estaba durmiendo. Por suerte no escuchó, pues sí estaba profundamente dormida .

Al llegar a casa de Estéfani, ella no se levantaba. Le pedí que despertara, pero no quería moverse. Me dijo: "Llévame cargada". Me quedé muy sonrojado, porque Crístofer y el taxista me miraban con una sonrisa molestosa. Le dije que no; ella insistía y le pedí a Crístofer que me ayudara a llevarla. Creo que eso la despertó y me dijo: "Está bien... Aún puedo levantarme sola". En mi interior me sentía aliviado y al mismo tiempo me reía, porque ella no quería que Crístofer la tocara. Nos despedimos de ella, entró a su casa. Finalmente nos fuimos Crístofer y yo a mi casa a planear algo qué hacer en la tarde con todos los que estuvieran libres.

3 may 2011

Por fin viernes

26 de Enero de 2007 Viernes

Al fin terminó la primera semana de mis clases. Siento que estoy en una prisión... Debería estar disfrutando las vacaciones con mis amigos. Pero, si lo tomo del lado amable creo que voy a aprender... A quién engaño, la verdad es que quiero pasar las vacaciones con todos y quiero salir con Estéfani. Hace un par de días me enteré que Ronald, Cristofer (más o menos), Teresa, Estéfani, Katty y María somos quienes estamos haciendo varias cosas.

Las personas con las que estudio matemática e ingles son muy raras. Cuando hablo con ellos, me responden como si nos conocieramos de tiempo. Cuando llego al salón, ellos me saludan muy amigablemente, si hasta ya me han puesto un apodo. Las chicas con las que converso, aparte que no son tan atractiva, me dicen: "Oye... Me parece que nos hemos visto en algún lado. ¿Estás en un relación con alguien?". Simplemente les digo que sí de una forma asustada, aunque eso ya no sea verdad. Otras me preguntan sobre inglés o matemáticas y como no quiero hablar con ellas, les digo que no sé. Tengo una amiga llamada Ana, es algo rara y dice las cosas como son; la verdad, su comportamiento, me parece extraño .

Hoy quería salir con Estéfani o al menos esa era la idea. Intenté ir a su casa, pero en el camino me encontré con Pepe, Robin, Mingo y Casandra. Los saludé (error mío), me preguntaron a dónde iba y les respondí que iba a mi casa (otro error, debí decir la verdad o decir que estaba ocupado). Ellos tuvieron la "brillante" idea de llevarme con ellos, porque tenían una pequeña reunión de toda la promoción. Ahí me encontré con todos, y cuando digo todos es todos, Crístofer, Ronald, Mike, Katty, María, Diego, etc, etc... La verdad no recordaba esa reunión. Todos me preguntaron qué es lo que hacía y a dónde iba. Les respondí con una sonrisa un poco forzada que me iba a mi casa, porque me estaba muriendo de sueño por el cansancio. Todos empezaron a decir algo como: "AHHH Luchín, tú siempre con sueño".

Al final, mientras todos estabamos brindando, pensé en Estéfani, ya que quería pasar un día con ella. En realidad hasta que llegaran las nueve de la noche, pues de verdad estaba muy cansado por estudiar y nadar en la mañana. Como a mí no me gusta hacer casi nada en mi verano mas que pasarla con mi amigos. Bueno, a la hora del brindis, todos estaban felices, debido a que eran vacaciones y nadie tenía cosas que hacer y solo querían descanzar. Minutos después, todos estaban con un nivel de alcohol para morir... Me sentí preocupado, ya que solo Ramiro y yo quedábamos conscientes de lo que pasaba. Mientras tanto, todos en el lugar  estaban a unos vasos de comenzar a volar. Por ejemplo, Cristofer con Mingo empezaron a correr por la calle y cuando les preguntamos el porqué. Ellos dijeron algo parecido: "La verdad... Es que... Tampoco lo recordamos. Creo que era una carrera". Me quedé un poco sorprendido por los hechos a mi alrededor, asi que decidií irme; sin embargo, cuando estaba apunto de irme, Ronald se resbaló y me cayó un vaso con cerveza en el pantalón.

Al llegar a mi casa, mis papás me preguntaron muy molestos dónde había estado. Les respondí que había estado en una reunión, pero que no había tenído la iniciativa, sino que había sido llevado a la fuerza. Ellos empezaron a olerme desde lejos y me dijeron que apestaba a alcohol. Les dije que no pensaran mal de mí, ya que no me gustaba tomar. A pesar de lo dicho, estoy castigado, porque no pedí permiso para ir a esa reunión. Bueno, creo que no podré salir con Estef por 2 semanas...

18 abr 2011

Actividades de verano

21 de Enero de 2007 Domingo

Creo que mis vacaciones han terminado más rápido de lo que pensaba. Mis papás me inscribieron en un colegio para hacer natación y en una academia para estudiar matemáticas e inglés. Técnicamente mi horario sería: De 9 a 10 a.m. natación; y de 3 p.m. a 6 p.m. matemáticas e inglés. Desde hoy, mis días serán algo ocupados, por suerte solo será por un mes.

Pasando a otro tema, creo que haber guardado el último 30% de mis fotos con Jina me causó una pequeña pesadilla, ya que soñe que ella y yo estábamos sentados en la cama de su habitación y me preguntó: "Y... ¿De verdad te quieres olvidar de mí?". Le repondí con mucha tristeza: "Es lo mejor... Sabemos que si continúo pensado en ti... No sé como prodría reaccionar". Me repondió muy triste: "Si crees que es lo mejor...". Se paró, me besó en la mejilla y antes de cruzar por la puerta giró a decirme: "Te voy a extrañar". Después cruzó la puerta y vi cómo se desvanecía lentamente. En ese momento desperté y me quedé muy triste; tenía muchas ganas de llorar, pero logré controlarme debido a que me repetí muchas veces que solo fue un sueño.

Me quedé sentado mirando el suelo y pensando casi media hora, hasta que mi mamá me dijo que me levantara, ya que no podía quedarme hasta tan tarde acostado, aunque fueran vacaciones. Me levanté como si no hubiera dormido bien en toda la noche. Me fui a desayunar, miré la ventana y me dije: "Debo tranquilizarme... Solo fue un sueño, pon la mente en blanco". Me calmé y empezé a conversar con mis hermanos sobre otros temas. Más tarde, decidí averiguar algunas cosas como: ¿Qué hacía Mike?, ¿Cristofer este verano hará algo?, ¿Katty trabajará de camarera otra vez?, ¿Teresa y Estéfani harán deportes en el colegio este verano?, etc.

Salí a las diez de la mañana, primero me fui a la casa de Katty, quien me saludó con mucha alegría, para saber cómo le iba y qué estaba haciendo. Me dijo que estaba haciendo deportes, porque el dinero no era necesario para ella en estas vacaciones. Mientras estábamos conversando ví que pasó media hora y quería visitar a muchas personas. Por eso, le pregunté si quiería venir conmigo a saludar a los demás. Sin embargo, me dijo que iba a salir con su mamá al mercado. Dada la situación, nos despedimos y dijo que le avisara si en algún momento pensabamos en reunirnos con los demás. Luego, me fui a la casa de Cristofer y me dijeron que estaba durmiendo; Cristofer, Pepe y Ramiro tambien estaban durmiendo. Había perdido mucho tiempo en ir a sus casas para que al final me dijeran que estaban durmiendo. Prefiero ya no hablar o recordarme de eso.

Finalmente, decidí ir a casa de Fernando, pero la casa de Teresa estaba más cerca y me fui a saber cómo estaban. Llegué y me abrió Estéfani. Al momento de verla, ella se sonrojó, porque no esperaba que la visitara en domingo. La saludé y me preguntó si quería pasar, ya que no había nadie más; me empezó a latir bastante rápido el corazón y le dije: "S-Sabes, creo que sería mejor salir a dar- a dar... Unas vueltas, ya que-ya que- ya que estoy pasando por la casa de todos para saber qué hacen el el verano JEJE". Ella me preguntó si me podía acompañar, le dije muy nervioso que no había problema. Ella muy feliz fue por sus llaves y salió disparada. Fuimos en camino a la casa de Fernando, ya que era la última casa que quería visitar, aunque al final él no se encontraba.

Cuando estabamos caminando de regreso a su casa, decidimos dar unas pequeñas vueltas por un camino más largo. Estuvimos conversando de qué es lo que ibamos hacer en sus vacaciones. Me contó que iba al colegio para entrenar atletismo, pues pertenece al equipo de atletismo del colegio y suelen competir contra otros colegios. Le dije que era interesante y su horario era de 9 a 11:30 a.m... Después, me dijo que le había provocado un helado, porque tenía mucho calor; le dije que mucho helado la podía engordar. Me miró como diciendo:"Aguafiestas" y luego nos reímos por la expressión de niña que puso. Al sacar mi billetera encontré una foto de Jina, ya que era la única foto que aún no había sacado, porque hace algún tiempo que no llevaba mi billetera. Me paralicé unos segundos por la impresión, pero Estéfani me preguntó si todo estaba bien, le dije que sí y le pedí al heladero uno... Estéfani pidió el más caro y me quedé casi sin dinero. 


Después, mientras caminábamos estuve muy pensativo por ver la foto, me parece que ella se dio cuenta, pues me preguntó si le había molestado comprarle el helado. Luego, acercó el helado a mi cara con un gesto muy... muy... Se veía tan bonita estando un poco sonrojada y dubitativa que no dejé de sonreir mucho. Nos sentamos en un parque y mientras comíamos le dije que no era por el helado, sino que había sido otra cosa. Esto generó que me preguntara con mucha insistencia qué era. Le dije que no, pero con un tono juguetón y en broma. Ello le causó interés en saber qué era, pero, por tratar de jalarme el brazo para que le cuente, se le cayó el helado encima de mí, por mi brazo izquierdo y piernas. Recuerdo que se puso roja como tomate y se fue corriendo a buscar servilletas y una botella de agua para poder limpiarme. Una vez que los encontró, remojó un poco la servilleta con agua y empezó a limpiar mi pantalón. A pesar de que le dije que podía buscar un baño cerca, siguió mientras decía que era su forma de disculpase. Al llegar a mi brazo, me puso un poco más nervioso, pues la estuve mirando muy de cerca y su cabello olía muy rico. Unos segundos después, giró su cara hacia mí y simplemente nos mirábamos a los ojos. Me dieron ganas de acariciarle el cabello; pero, escuchamos un ruido y nos separamos. 

La causa del ruido fue una gatita que estaba detrás de la banca en la cual estábamos sentado comiendo el helado. Era una gatita pequeña y bonita, parecía de unos 4 o 5 meses; se había acercado a comer el barquillo del helado que se había caído. La estuvimos viendo un rato, porque nos gustan los gatos; además, era raro ver a un gato comer algo así. Cuando parecía que se iba, notamos que se movía raro y de pronto... Saltó a las piernas de Estéfani.

La gatita estaba feliz, pues ronroneaba mucho. Cuando estábamos por irnos, le dije que deberíamos dejarlo en un lugar seguro, dado que podía ser de alguien a quien se le había escapado. Pero, cuando lo dejábamos en un jardín cerca a una casa, la gatita nos estaba siguiendo. Lo volvimos a dejar en el jardín, pero pasó lo mismo. Hasta que tocamos el timbre de la casa y nos dijeron que no era su gato. Preguntamos por un par de casa más, pero todo nos decían lo mismo. Al saber esto, Estéfani me dijo que me la llevara, pero le dije que yo ya tenía uno y el problema era que se podían pelear. Le iba preguntar si se la podía llevar, pero se me adelantó y dijo que se la llevaría a su casa, ya que no tenía uno hace muchco tiempo. Fuimos a su casa y ahí la dejé con la gatita en sus brazos.

11 abr 2011

¡Arriba las manos!

19 de Enero de 2007 Viernes

Es un alivio que todo haya ido bien, pero no me quiero adelantar mucho a la historia. Primero quiero contar que he guardado más del 70% de fotos que tengo de Jina. (ya no me afecta tanto decir su nombre). No sé si es por eso, pero me siento más tranquilo. El único problema es que no sé donde guardar la caja donde tengo todos esos recuerdos. No le quiero dar a mis papás, porque ellos son muy curiosos y empezarían a mirar todas las fotos y me daría mucha vergüenza. A mis hermanos menos, ellos ni sabían que estaba con Jina. A mis abuelitos sería mejor, pero siempre alguna tía revisa las cosas de mis abulitos y por casualidad podrían encontrar la caja, ver mis cosas y empezar a crear rumores a toda mi familia. Enterrarlo me parece muy cruel, ya que estoy molesto y triste pero no tanto.

Cambiando de tema, hoy mis papás me dijeron que vaya a pagar mi celular al banco, porque no me querían ver todo el día de vago en la casa. Rayos, era eso o ponerme a estudiar. No me quería ir solo al banco, así que llamé a Cristofer que siempre me acompaña a todas partes, pero esta vez no podía. Mike estaba igual de ocupado. Fernando no se encontraba. Mis hermanos me dijeron que vaya solo, porque ellos simplemente no me querían acompañar. Como no me quería ir solo pensé en llamar a Estéfani, pero fue la llamada más difícil que jamás había hecho. Creo que demoré 20 minutos antes de poder marcar. Me sentía muy nervioso, como si fuese a llamar por primera vez a la chica que me gustaba. Me contestó su mamá, me avergoncé con una risita nerviosa, y luego me pasó con Estéfani. Muy nervioso y tartamudeando casi todo el tiempo le pedí que me acompañara al banco. Ella aceptó, la escuchaba feliz, y le dije que iba a pasar por ella en unos minutos.

Al llegar a su casa, Teresa me abrió la puerta, me miró y cerró la puerta. Me quedé un poquito paralizado y sonrojado; no obstante, volví a tocar, me abrió y me preguntó qué quería. Le dije que iba a salir con Estéfani, me hizo pasar y luego me dijo algo como: " Respondeme con la verdad... ¿De verdad ya superaste lo de Jina?... ¿No sales con Estéfani por rencor?" - Le respondí con una sonrisa: "Ya te dije que de verdad me gusta Estéfani. No te preocupes, sé que es raro que un amigo tuyo salga con tu hermana menor pero..." - Al escucharme decir eso, me avergonzé y preferí quedarme callado. Ella me dijo: "Está bien, te la encargo. Trata de no lastimarla... ¿ok?... O te las verás conmigo HAHA" - Nos reímos y se fue a llamarla. Ella venía con una ropa muy veraniega y mi corazón empeezó a latir como loco. Ella me dijo con unas mejillas rojitas: "¿Listo?" - Le respondí que estaba listo y nos fuimos. En el camino hacia el banco me preguntó si aun estaba confundido, le respondí: "¿AH?... ¿De qué me hablas?" - Nos empezamos reir y le invité un helado, ya que hacia mucho calor en la mañana.

Cuando llegamos al banco, empezamos a hacer la fila mientras ella me estaba platicando sobre sus deportes del verano. Momentos después, un hombre que estaba adelante de nosotros, nos dijo que podíamos tomar su lugar. Para mí parecía amable el señor, era un caballero, lo creía por su vestimente (terno), su forma de hablar y su amabilidad; o eso pensé. Seguimos conversando y cerca de la ventanilla, cuando faltaban unas dos personas antes que nos tocara el turno a nosotros, ocurrió algo inusual. Me estaba riendo con Estéfani, cuando de repente se escucharon disparos... Hirieron a los policias de la entrada. Todas las personas empezaron a mirar la entrada para darse cuenta que los ladrones ya habían entrado. Todos empezaron a gritar. Una señora, que estaba atrás del joven, gritó muy fuerte y el joven que parecía muy amable. Sacó un arma de su terno, la golpeó y le dijo: "¡Callate mierda!" - De diferentes lugares del banco varios hombres en terno sacaron sus armas y, algunos cuantos de ellos, se fueron a los asistentes del banco a perdirles el dinero apuntándoles con el arma.

De los segundos en que la gente gritaba, pasó a un silencio terrible. Los ladrones empezaron a gritar frases similares: "Todos al suelo, no sean idiotas, si hacen movimientos estúpidos no respondo" - Me pegué a la pared y Estéfani se sentó en el espacio que dejé entre mis piernas. Ella estaba muy asustada y la abrazé para que se calmara. Estéfani me miraba, porque ella sentía que yo también tenía mucho miedo. También la miraba, temblaba un poco... Un asqueroso ladrón con lentes oscuros, barba y mal aliento se acercó a nosotros y me dijo: "Amor de pubertos... Seguro que te la tiras todas la noche" - Solo empecé a temblar y recordé cuando Jina y yo quedamos atrapados en las vacaciones del año.

Algunos de ellos llevaron muchas bolsas y maletines de dinero y les gritaron a los hombres con terno que era hora de irse... Ellos se subieron en varios taxis sin placas y se fueron apuntando a los policías, que estaban gravemente heridos en el suelo. Minutos después, llegaron muchos policías y le empezaron a preguntar a todos los presentes qué es lo que había ocurrido... Estaba muy molesto por haber sido asaltado. Cuando se acercaron a mí les estuve gritando: "¡Maldición...¿Dónde estaban? Nunca los veo en las calles, pero siempre los veo cagar el tráfico!" - Estaba a punto de insultarlos, pero Estéfani temerosa me dijo que me callara y me jaló del brazó afuera del lugar mientras les agradecía a los policia.

Al salir le pregunté con el mismo tono de voz: "¿Por qué no me dejaste decirle lo que se merecen esos? - La miré y noté que sus ojos estaban algo rojos como si estuviera llorando. Me respondió que no era culpa de ellos y me pidió que me tranquilizara... No supe qué decir. Trataba de respirar para relajarme, le pedí perdón y me pidió que tambien le pidiera disculpas a los policias. Bueno así lo hice, pues Estéfani me hizo notar lo alterado que estuve. En fin, la "cita" no salió como lo esperaba.

4 abr 2011

Estamos de vacaciones

16 de Enero de 2007 Martes

Haber salido con los amigos se siente bien. Hasta siento que ya me estoy olvidando poco a poco de "ella". Hace dos días guardé en una caja algunas fotos que tengo con "ella". Debo admitir que esos días fueron difíciles, porque me sentaba en el suelo, cogía un paquete de fotos, las revisaba y miraba cuales eran las menos importantes para guardarlas. Mis papás me dieron ese consejo. También me dijeron que, cuando ya me sienta mejor, guarde todas las fotos, porque, si las tenía a mi alcance, me iba a ganar la curiosidad de revisar y recordar.

Para no salirme del tema, fue genial haber salido ayer con los amigos, dado que siempre ocurren tonterías cuando salimos. Esta no podía ser la excepción. Empezó cuando nos juntamos los seis de siempre: Fermando, Cristofer, Ramiro, Ronald, Mike y yo. Todos ellos sabían que yo aún estaba un poco triste por la perdida, así que me ofrecieron ir a comer. Al principio estaba un poco dudoso, pero como yo no pagaba y lo hacían para que yo me animara, acepté feliz. Nos reunimos en la casa de Ronald, empezamos hacer unos pequeños problemas y luego, cuando ya era un poco mas tarde, se nos abrió el apetito. En el camino estábamos recordando todas las estupideces ocurridas en el colegio y planeando qué podíamos hacer para poder gozar de las vacaciones. Cuando llegamos al restaurante, el mozo nos llevó a una mesa, pero nos miraba de una manera extraña. Al principio pensé: "Debe ser, porque somos muchachos y siempre se preguntan si llevamos dinero" - Pedimos la comida y cuando llegó... Había traído consigo una torta. Eso no fue lo único extraño. Después, aparecieron cuatros mozos más de la nada y comenzaron a cantar el "Happy Brithday" a Fernando. Todos estábamos muy confundidos, pero como no nos hicieron caso al decirles que no era su cumpleaños, también le seguimos la canción.

Terminada la canción, Fernando, siguiendo la corriente, muy contento dijo algo como: "Gracias muchachos, yo creía que no se acordaban de mi cumpleaños" - Todos nos empezamos a reir y los mozos alrededor de nosotros dijeron estas palabras mágicas que nunca deben ser pronunciadas cerca de una torta: "Mor-di-da, mor-di-da, mor-di-da..." - Fernando acercó su cara y Mike con Ramiro le sumergieron la cara en la torta. Todos se empezaron a reir hasta que vi acercarse a personas que parecían dueñas de la torta. En ese momento, lo único que pensé fue: "¿Escapo o espero?... Voy al baño" - Les dije a todos, con una sonrisa, que me iba al baño. Me encerré ahí por unos minutos hasta que cuando volví, todo parecía normal. Les pregunté si algo había pasado, Mike y Ramiro me dijeron: "Lucho, no te asustes, pero la torta era de otra persona. ( yo con cara de asombro fingida) Y para no meternos en problemas les mentimos que de verdad el el cumpleaños de Fernando... Las personas son tan amable van a venir a nuestra mesa para celebrar la de su hijo y de Fernando, porque para ellos un cumpleaños no es algo que se debe pasar con solo unos amigos." - Me quedé con una cara de: "No sean imbéciles" - Le pedí que dijera la verdad, pero me respondió que la torta que pidieron era muy cara.

No pudimos hacer nada y celebramos el cumpleños de Fernando y William HAHAHAHA. Toda la familia feliz le tomaba la fotos a los dos. Los familiares se acercaron a ellos y se tomaban fotos con los cumpleañeros. Al final, la familia quería pagar toda la cuenta, pero mis amigos en un acto de nobleza insistieron en pagar la mitad. Cuando nos fuimos, a medio camino, todos seguíamos con las bromas hacia Fernando y nos reíamos, porque ni siquiera le habían pedido el documento de identidad para verificar la fecha de nacimiento de Fernando. Después de tantas risas, me dieron ganas de visitar a Estéfani, ya que aún era temprano (7:30 p.m. creo). Me despedí de mis amigos, quienes lanzaron una mirada pícara y me dijeron que me comporte. Me fui a verla, cuando toqué el timbre, ella misma abrió la puerta y me saludó amablemente. Mientras íbamos a su habitación, me preguntó qué hacía ahí. Le dije que tenía ganas de conversar un poco con ella. Sonrojada me dijo: "Sabes que podías llamarme a mi teléfono ¿verdad?" - Le respondí con ironía, pero quería ver tu cara de sorpresa cuando te cuente" - Sé que puso feliz al escuchar eso y le conté toda la historia. Una vez que terminé de hablar, me miró con una cara medio molesta, prácticamente era desaprobación. Empecé a mirarla y me llamó idiota. Le pregunté el porqué, me eché en su cama y me respondió: "Tú hubieras dicho la verdad... Aunque... Creo que está bien lo que hicieron al final." - 

Luego, hubo mucho silencio en su habitación y ninguno sabía qué decir. Nos mirábamos de vez en cuando hasta que ella comenzó a acercarse hacia mí. Cuando su cara estaba cerca a la mía, su mamá dijo desde lejos: "Teresa, Estéfani vengan todos a comer." - Eso hizo que  Estéfani se alejara de mí y que yo me sentara en la cama muy rápidamente. Unos segundos después, su mamá pasó por la puerta de la habitación y, como no sabía que estaba ahí, me vió con una sonrisa y me invitó a comer. Muy cortésmente le dije que ya había comido con algunos amigos y que solo estaba de pasadita visitando a Estéfani. Me comprendió, pero igual muy alegre me ofreció un postre. Estéfani por su parte estaba un poco roja y, para que su mamá no lo notara, estaba "buscando" algo en su mesa de noche. Le respondí a su mamá que para la próxima, sí o sí aceptaba su oferta, pero estaba bastante ello. La señora me sonrió y me dijo que estaba bien. Finalemte me despedí y regresé a casa un poco avergonzado, pues su mamá casi nos vio.

23 mar 2011

Tiempo para empezar

12 de Enero de 2007 Viernes

Fue una mañana soleada, todo parecía volver a la normalidad. Yo estaba con el corazón roto por la pérdida de la chica que más quise. Por donde caminaba parecía que había un recuerdo. Caminaba por mi habitación, vi mi guitarra y recordé cuando le iba a dedircar una canción, la cual nunca escuchó. Miraba mis almohadas y recordaba cuando conversábamos mirando al techo... Bajé al primer piso, mientras caminaba cerca del almacén, observé la basura que ahí había y recordé cuando teníamos que comprar los adornos del aula, porque eramos los delegados de clase. Cerca de mi escritorio, recordé cuando me besé con ella y todos mis primos nos vieron... Al ver mi comerdor, recordé cuando sus papás y ella desayunaron junto a nosotros... No es que me guste recordar pero, asi es mi memoria, siempre recuerda muchas cosas de las cuales a veces me gustaría olvidar...

Hoy salí con todos mis amigos, pero mientras estábamos caminando, Cristofer, Mike y Ronald me preguntaron si tengo algo con Estéfani. Les respondí con lo ocurrido en la clausura y en la casa de Teresa. Me miraron preocupados y no debería acercarme de  así hasta que aclarara mi mente; sin embargo, les dije que no se preocuparan, ya que en el transcurso de la semana me decidí a no salir con Estéfani, porque parecía que solo sería una excusa para olvidarme de "ella" y no quería hacerle eso... Como ese día no estaba de tan buen ánimo, decidí irme. Todos me empezaron a decir que no me vaya, pues era muy temprano. Les repondí que no me sentía muy bien y decidí irme caminando. (Eran las cinco de la tarde)

Dejé de ver a mis amigos, suspiraba cabizbajo y me fui a tomar al para calmar un poco mi sed. Cuando me senté en el local, vi que habían muchas parejas alrededor de mí. Era el único que estaba solo. Empecé recordar que siempre iba con "ella" a lugares como esos y suspiré más. Segundo antes del suspiro, alguien me tapó los ojos con las manos y me dijo: "¿Quién so...? Ese fue un gran suspiro. ¿Qué pasó?" - Sacó las manos de mi cara y, un poco sorprendido, vi que era Estéfani. Perplejo por encontrarla, le pregunté qué hacía ahí. Me respondió que iba hacer unas compras rápidas, porque no tenía ropa deportiva Luego, me preguntó qué hacía solo. Le respondí que estuve con mis amigos y que estaba de paso por ese lugar. Después, cogí mi celular para poder ignorarla y se fuera. Pero le brillaron los ojos y me pidió que la acompañara a comprar, pues las tiendas de ropa estaban muy cerca al lugar en el que estábamos. Traté de inventar algo, pero no me salió y, para que no piense que no la quería acompañar, tuve que aceptar. Con una sonrisota, me dijo que pidiera mi bebida para llevar.

Caminando por la tienda, estaba muy nervioso, mi corazón latía mucho y quería cogerle la mano. En mi interior sabía que era ese maldito sentimiento de enamoramiento. Pero me pellizcaba la mano para tranquilizarme. Cuando llegamos a la sección deportiva, suavemente me jaló de la mano, pues me distraje viendo que habían bastantes personas. Luego de ello, empezó a buscar lo que necesitaba. Sin embargo, mientras la veía buscar ropa, solo faltaba que se me caiga la baba, pues se veía muy linda cuando seleccionaba aquello que le gustaba. Me encantó ver como sus mechones rubios caían por su cara y cómo se los acomodaba por detrás de la oreja... Quería gritar. Luego, pasaron unos minutos y me dijo que se iba a probar ropa. Mientras la esperaba me escribieron mis amigos, pero no les respondí. Cuando salió... Me quedé atontado y sin palabras, no me había fijado cuánto se había desarrollado Estéfani. Me preguntó cómo se veía y obviamente le dije que se veía preciosa, casi sin pensar en lo que decía. Se sonrojó y cuando se dio la vuelta mi cuerpo dio un pequeño salto de susto, pues se notaba mucho su retaguarda, troya, el culantro, el cucu, etc. Discretamente le dije lo que cualquier chico, un poco celoso, le diría a su chica: "Te queda espectacular, pero estoy seguro que una talla más te quedaría mejor" - Mucho más sonrojada que antes y con una sonrisa muy marcada me dijo: "Está bien, pero elegí este, porque es más cómodo para mí" - No sabía qué inventar, pero trataba de decirle que ese no. Al final, gracias a Dios, eligió una talla más y salimos del lugar.

De regreso a su casa, me agradeció y empezamos a conversar sobre cómo nos fue en colegio. Cerca de la puerta, me emocioné mucho y casi la beso, casi como un reflejo cuando la dejaba a "ella" en su casa. Sonrojada y confundida me preguntó: "¿Qué pasó?... ¿Qué te detuvo?" - Le respondí triste: "Perdón, pero siento que no está bien" - Me dijo nerviosa y triste: "Pero... ¿Por qué?... Está bien que seamos más que amigos, si sentimos lo mismo " - Una vez más le dije que me perdonara y me despedí. Cuando me estaba por ir, me agarró del brazo y me dijo: "Sé que aún te duele y es normal que duela... Pero, quiero que sepas que me gustas muchísimo" - Giré mi cara para verla y noté que su cara estaba muy roja como un tomate, pero mirando a otro lado por la vergüenza.  Me sentí muy feliz, le agradecí y me despedí con un beso en su mejilla, la cual estaba muy calientita. 

De verdad que estoy muy feliz al saber lo que Estéfani siente por mí, pero sé que primero debo convencer a todos y, más importante que ellos, converncerme a mí mismo que ya me olvidé de "ella"... De Jina... Será difícil, pues todavía me duele pensar en ella; pero, también sé que no será imposible.

20 mar 2011

Un comienzo diferente

06 de Enero de 2007 Sábado

Ha pasado tanto tiempo. ¿Si la extraño?... No lo sé, estoy muy confundido, ya que desde que "ella" se fue y me besé con Estéfani creí que nada me iba a importar; sin embargo, parece que mi conciencia decidió ya no escapar de la realidad. ¿Qué siento por Estéfani? La verdad siempre he sentido una atracción hacia ella. No sé si estoy enamorado, pero siento una emoción muy fuerte cuando estoy cerca de ella. ¿Si estoy triste?... No estoy seguro, solo me siento muy confundido como mencioné... Me parece que todo va estar bien, lo único que me va a molestar será el hecho de que, cuando volvamos a clases, todos me van a preguntar por "ella" y no sé que cara ponerles para responderles.

Después de cuestionarme y escribir lo que he pensado estos días, es hora de empezar... Después de la clausura, al despertar, me empezé a sentir mal, sentía que había hecho algo malo; cada vez que "ella" pasaba por mi mente, me sentía como un idiota. Empezaba a golpear la pared hasta que me tranquilizaba... En los días siguientes empecé a salir con mis amigos para poder olvidarme totalmente de "ella". En esas salidas me encontré con Estéfani, pues también salía con sus amiga. Fue algo incómodo, no para mí, para mis amigos, dado que el grupo de sus amigas y mis amigos no se conocían y siempre ocurre esa ¿timidez o vergüenza? cuando te acercas a un nuevo grupo. No obstante, Estéfani y yo conversábamos felices, porque no la había visto en desde el último día de clases. Todos mis amigos me miraban algo angustiados, porque estaba muy apegado a ella. Mientras que las amigas de ella, no parecían sorprendidas, sino que algunas se veían felices y otras tenían una expresión la misma expresion de mis amigos. Aún no estoy seguro si será por la incomidad que mencioné. En cambio, Estéfani y yo nos mirábamos sonrojados, porque nadie sabía lo ocurrido en la clausura... Por lo menos eso creo. (Como no me dejan salir en navidad ni año nuevo, no pude salir esos días)

Ayer llamé a Estéfani para dar un pequeño paseo el día de hoy. Ella aceptó y hoy me fui a su casa a recogerla. Su mamá me saludó muy amablemente y me dejó pasar. Mientras estaba con Estéfani, Teresa me llamó en privado a una habitación para decirme algo como: "Oye... Sabes que para Jina, tú aún eres lo más importante ¿verdad?" - Le respondí con una voz tranquila de no importarme: "Si fuera eso cierto, no se hubiera ido sin decirme nada" - Me repondió algo molesta: "No seas estúpido, estoy segura que no dijo nada para no preocuparnos." - Algo molesto le pregunté: "¿Entonces sabes algo de ella? ¿Te ha respondido los mensajes y llamadas que les haz hecho? - Me dijo algo más molesta que la vez anterior: "No me ha respondido... ¿Eso qué tiene que ver? - Le repondí muy molesto: "¡No dijo nada, porque quería olvidarse de todos... Asi que yo también prefiero hacer lo mismo y olvidarme de ella!" - Me respondió más molesta: "¡¿Y qué?...¿Estás usando a mi hermana para olvidarte de Jina?!" - Le respondí con la misma actitud: "¿Qué?... Si simplemente no quieres que esté con Estéfani dímelo, pero sabes que ella de verdad me atrae" - Teresa molesta y a punto de irse me dijo: "No puedo creer qué tan imbécil te has vuelto solo porque Jina se ha ido..." - Ella se fue y hubo un silencio total...

Después de que se fue, respiré unos segundos para poder calmarme, pues me sentía bastante triste por la discución en la cual, para ser sincero, no me esperaba esa reacción o respuestas de mi parte. Una vez que me calmé, me fui hacia la habitación de Estéfani, pero a medio camino me encontré con ella en la sala. Me dijo algo preocupada y triste: "Oye... ¿Te parece mejor si salimos otro día?..." - Cuando dijo eso, me pasó muy rápido por la mente que había escuchado todo lo que discutimos. Le dije que no tenía ningún problema, la besé en la mejilla y me fui a mi casa. Rayos, nada de esto estaría pasando...