Dilemas de la vida

16 de Junio de 2006 Viernes

 
Esto es para morirse de risa. Mi querido y estimado amigo, un poco ladrón, Fernando está en un dilema un poco divertido. Mañana es el cumpleaños de su mamá. Todos sabemos que una mamá es la persona que nos ha criado, nos ha cuidado, alimentado y nos quiere aunque seamos feos. Bueno, creo que todos ya sabemos lo que es una madre, una persona muy especial en síntesis. Sin más rodeos, Fernando quiere comprarle un regalo a su mamá con el dinero que tiene, producto de todo su trabajo con su papá en el verano. Claro que no lo va ha gastar todo en el regalo, ya que también ha gastado en el transcurso del año.

Eso es por una parte, pero por otra, él tenía planeado salir, el mismo día con su novia (es del colegio y se llama Andrea) y gastar el dinero que tenía, porque también es el cumpleaños de Andrea. Fernando estaba como loco cuando terminó de contarme esto. Le respondí que la elección más obvia era escoger a su mamá, pero él me respondió que, hace muchos días atrás, ya le había prometido a Andrea pasar su cumpleaños con ella. Le dije que el problema se iba solucionar fácilmente. Lo que tenía que hacer era pasar el cumpleaños de su mamá y luego pedirle dinero a su papá para pasar otro día con su novia. Me dijo que era una buena idea y se había decidido a decirle eso.

Luego en el receso, salimos del aula, la buscamos y Fernando le dijo algo como: " Andrea, mañana es el cumple de mi viejita, voy a comprarle una regalo y pasar todo el día con ella... ¿Te parece si pasamos otro día juntos?" - Le respondió de una forma tristona: "Fernando, pero... ¿Estás seguro? Me voy a poner muy triste si no estás tú... ¿Seguro que no quieres pasarla conmigo?" - Le dio unas mordiditas en el cuello HAHAHA. Me quedé impactado y con muchas ganas de irme. Fernando se quedó sin palabras y se la llevó a conversar en privado. La verdad, no sé qué habrá elegido.

Cuando me fui a buscar a Gina, todos mi amigos y los amigos de Ricardo estaban conversando. Algo normal e incómodo para mí. El verdadero problema, que me molestó, fue que Ricardo estaba sentado pegadito a Gina. Cuando vi eso lo quería matar, pero solo le dije, como si tuviera confianza: "Bueno Ricardo, el de la pija corta y los huevos largo, ¿puedes hacerme un espacio entre Gina y tú?" - Todos se partieron de risa y sentí que hubo un poquito de enemistad entre nosotros, pues me miró diferente. Para finalizar, Fernando, me dijo en el salón, que la próxima semana va a contarme lo que ha elegido. Espero que no lo hayan engatusado.